CatalanEnglishGermanSpanish

Cómo conseguir una comunicación de impacto en seguridad y salud laboral (Capítulo 1º)

La comunicación y la formación son elementos esenciales para la generación de cultura preventiva y para lograr comportamientos seguros y saludables. Los datos evidencian la necesidad de repensar el actual modelo y de transformarlo para lograr resultados positivos, teniendo en cuenta cuestiones como la diversidad de las plantillas (en cuanto a género, edad, origen étnico, nivel educativo, capacidades…), la incorporación de la creatividad, innovación y practicidad en los programas formativos y metodologías de aprendizaje, la capacidad comunicativa y pedagógica de los formadores, la digitalización y las nuevas formas de organización del trabajo, entre otras cuestiones.

Para fomentar una comunicación en seguridad y salud laboral eficaz y con impacto real, CAEB, de la mano de Full Audit, ha creado una colección de cuatro píldoras audiovisuales, de corta duración, para abordar los diferentes elementos de un proceso de comunicación.

Te presentamos aquí la PÍLDORA Nº 1 – Aspectos relevantes para lograr una comunicación eficaz en seguridad y salud laboral: Comunicación no verbal

 

Cuando hablamos de comunicación no sólo va a ser importante el mensaje, sino que la forma de hacerlo va a tener un impacto enorme en el proceso, tanto positivo como negativo. Por eso, queremos empezar esta serie de cuatro videos sobre comunicación aplicada a la Seguridad y Salud en el Trabajo, hablando sobre alguno de los aspectos relativos a la forma en la que nos comunicamos y, en particular, nos centraremos en:
▪ El uso de la voz
▪ El uso de los silencios controlados
▪ El contacto visual
▪ El uso del espacio y proxémica
▪ Y la kinesia y gestos.

 

Uso de la voz: 

La velocidad, la intensidad, el tono, etc. de nuestra voz es algo muy importante que debemos trabajar en nuestros discursos ya que, por ejemplo, una voz monótona puede arruinar el mejor de los discursos técnicos.
¿Qué aspectos debemos dominar?
1. Lo primero que debemos tener en cuenta en el uso de la voz es que debemos intentar llevar a cabo una respiración abdominal ya que nos ayudará a hablar con más claridad y facilidad, sin peligro de quedar afónico.

2. Y a partir de ahí y en función de nuestros intereses, jugaremos con diferentes aspectos de la voz, como, por ejemplo:
▪ El volumen y la articulación para enfatizar partes de nuestro discurso.
▪ La velocidad para jugar con el efecto de las palabras. Por ejemplo, si queremos convencer, reduciremos la velocidad.
▪ Usaremos diferentes registros para huir de discursos monótonos.
▪ Y, por último, podemos trabajar con el tono. Por ejemplo, el tono ascendente al final de una oración le restará credibilidad.

 

Uso de silencias controlados: 

Los silencios controlados son una potente herramienta que nos acercará a un sinfín de recursos en nuestro discurso.

  1. Antes de empezar: nos permitirán comenzar de una manera brillante ayudándonos a conectar con los oyentes.

2. Durante el discurso:

• Darán dinamismo y sentido.
• Nos permitirán prestar más y mejor atención a la parte visual.
• Y nos brindarán momentos para poder reflexionar y que hablemos, sólo, de aquello que sabemos y conocemos.

Cómo lo usaremos:
• Lo primero que tenemos que hacer es pensar en qué momentos los vamos a usar, por ejemplo:
• Si lo colocamos después de decir algo, dará brillo a lo que hemos dicho.
• Y si lo colocamos antes de decir algo, despertará el interés por lo que vamos a decir.
• Y siempre los emplearemos para sustituir las muletillas que se nos escapan cuando no sabemos qué decir o estamos pensando en la próxima frase …..seguro que os suenan los famosos “bien”, “pueees”, “bueno”, “¿no?” “¿vale?”.

 

Contacto visual:

La mirada es una de las herramientas más importantes que tenemos y nos ayudará, entre otras cosas:
▪ a conectar con nuestros oyentes.
▪ a saber qué piensan.
▪ Y a transmitirles emociones.

Para ello usaremos la mirada y tendremos en cuenta que:
▪ Debemos establecer contacto visual con nuestros oyentes antes de empezar a hablar.
▪ No debemos mirar al vacío jamás.
▪ Y haremos sentir a nuestros oyentes que son lo más importante en este momento, que los atendemos con todos nuestros sentidos y que lo que les contamos es bueno para ellos.

En función de los que queramos conseguir, podremos usar miradas diferentes:
▪ Mirar a los ojos mientras se hace una petición es útil para aumentar tu capacidad de persuasión.
▪ Entrecerrar los párpados si queremos denotar enfoque en algo.
▪ O usar la técnica del triángulo para trabajar las diferentes miradas de poder, social e íntima.

 

Uso del espacio y proxémica:

La proxémica hace referencia al uso que hacemos del espacio en las relaciones con los demás. Dentro de ella, podemos trabajar varios aspectos:

1. La distancia: para mensajes íntimos podemos ir desde el contacto físico a los 45 cm, mientras que para mensajes con un equipo o en nuestra empresa, usaremos espacios que van desde los 120 a los 360 cm.
2. Tendremos en cuenta nuestra situación: cuando transmitimos datos empíricos, estadísticas, etc. nos situaremos a la izquierda de nuestros oyentes y si queremos activar emociones nos situaremos a su derecha.
3. Y, por último, el ángulo: con un ángulo de 90 grados con nuestros oyentes generamos cooperación, mientras que, si queremos mostrarnos tajantes o reprimir a alguien, nos situaremos a 180 grados.

En cuanto al uso del espacio, el movimiento va a ser determinante y va a afectar tremendamente en nuestra comunicación y ha de ser consecuente con el mensaje a transmitir:
Por ejemplo, si queremos transmitir un mensaje íntimo, no nos moveremos mucho y emplearemos técnicas gestuales o de control de la voz, mientras que, si queremos motivar, nos moveremos más.

 

Kinesia y gestos: 

La kinesia, se va a enfocar en cómo nuestros movimientos corporales y expresiones transmiten los mensajes. Aquí, nos centraremos en:

  • Las expresiones faciales: que son ventanas a nuestras reacciones emocionales y, generalmente, las más fáciles de interpretar por el oyente. Un buen ejemplo lo tenemos en el uso de la sonrisa que, si es amplia nos acercará a los demás expresando alegría y transparencia, pero si es una sonrisa estrecha denotará, inseguridad.
  • También podemos trabajar con los gestos de los brazos y manos: que nos ayudarán a enfatizar los mensajes o expresar emociones, por ejemplo, mostrar las palmas lo podemos usar para generar credibilidad.
  • Y por último, no podemos olvidar la postura corporal: de la que podemos ver varios ejemplos:

– cruzar los brazos se puede interpretar como que no se siente en confianza en ese momento o que nos cerramos.
– O, mantener la espalda rígida, puede denotar inseguridad.

 

¿Y ahora qué?:

En este video hemos analizado cómo la forma de transmitir nuestro discurso impacta en el resultado del mismo.
En los próximos videos iremos ahondando en los diferentes aspectos del Discurso ligados al qué transmitimos y en las diferentes estructuras de comunicación aplicadas a la seguridad y salud laboral.

 

Programa con financiación de: